Con la muerte de José Eduardo Ciprián Lebrón (Chucky), ultimado a tiros junto a otros dos hombres en el sector Libertador de Herrera, ya suman tres los implicados en el atentado contra David Ortiz que han sido asesinados en circunstancias similares.
Ciprián Lebrón, quien cayó abatido la madrugada del lunes junto a Javier Santana Asencio y José Antonio Ovalles Martínez, había sido condenado a 10 años de prisión por su presunta participación en el ataque contra el expelotero de Grandes Ligas.
Hasta el momento se desconoce cómo habría recuperado su libertad.
De acuerdo con las investigaciones, Ciprián Lebrón y Pérez García se desplazaban en una yipeta negra por la zona cuando fueron interceptados por desconocidos que les dispararon sin mediar palabras.
Durante el ataque, Ovalles Martínez salió de su vivienda al escuchar los disparos y también fue alcanzado por los agresores, que luego emprendieron la huida.
Santana Asencio resultó herido y falleció camino al hospital.
Con el triple homicidio registrado en Herrera la madrugada de este lunes, suman dos los ocurridos en el país en las últimas 24 horas.
En la madrugada del domingo, tres personas fallecieron durante un tiroteo en un establecimiento de comida en la calle principal del municipio El Factor, provincia María Trinidad Sánchez.
Las víctimas fueron identificadas como Ronny Sosa Ozoria, de 32 años; Tony Guillermo Brito Reyes, de 36; y María Francisca Reyes, de 28, todos residentes en la zona de Madre Vieja y Abita 01.
Otros implicados
En enero de 2024, el cadáver de Víctor Hugo Gómez Vásquez, señalado como supuesto autor intelectual del atentado contra Ortiz, fue hallado en estado de descomposición en la comunidad La Guáyiga, municipio Pedro Brand, provincia Santo Domingo, luego de haber sido reportado como desaparecido por sus familiares.
Las pesquisas establecieron que Gómez Vásquez fue secuestrado tras reunirse en la avenida República de Colombia con varios individuos, con quienes presuntamente negociaba la venta de un vehículo.
Su identificación tardó varios meses, tras una extensas labor de las autoridades judiciales y policiales.